En está sección hablaremos de los cruceros que tienen como centro de sus singladura Oceanía. Los cruceros que zarpan de la costa oeste de los Estados Unidos y que recorren el Pacífico Norte, Canadá, Alaska y Hawai tienen su propia página. Lo mismo ocurre con los cruceros que tocan los puertos del sudeste asiático, Filipinas, China y Japón.
Aquí nos centramos en Oceanía, en Australia la mayor isla del mundo, Nueva Zelanda, Melanesia, Polinesia y Micronesia. Se trata de destinos recientes, aún poco conocidos en Europa y América Latina, aunque ya de tradición en Francia, Estados Unidos o Gran Bretaña. Cruceros con aire exótico pero que poseen todas las comodidades y que nos llevan a lugares de belleza insospechada.
Conozca con nosotros la Gran Barrera de Coral, el archipiélago de Vanuatu, Fidji o el enjambre de islas de la Polinesia Francesa cantado por Brel, pintado por Gauguin. Arte, naturaleza, tradiciones y modernidad, todo en uno.
Cruceros por las Antípodas.
Encontramos varios tipos de cruceros, que van desde los cruceros más clásicos que parten de Sydney en Australia y Auckland en Nueva Zelanda. Con una duración que varía de los 14 a los 20 días, estos cruceros recorren los principales puertos de la costa este de Australia, Nueva Zelanda, Nueva Caledonia sobre todo. Son cruceros donde la naturaleza es espectacular y la fauna marina es también un actor clave en el viaje.
Otros cruceros salen de Papeete, la capital de la Polinesia Francesa, y recorren sobre todo el gran territorio francés de Oceanía. Los barcos son más pequeños y el viaje toca escalas menos concurridas. Recorriendo los archipiélagos de Sociedad, las Marquesas, las islas Tuamotu y Australes, pasamos de los paisajes que ensueñan aún a los europeos y americanos, a los atolones menos frecuentados. La Polinesia actual no es la Gauguin, pero aún posee los encantos necesarios para que el crucero sea algo inolvidable.
Similares son los cruceros que desde Noumea, en la también francesa Nueva Caledonia, y luego se internan en el archipiélago de Vanuatu y Papua Nueva Guinea. Aquí el crucero recuerda más a las aventuras de Jack London por el Pacífico, eso sí, libres de los problemas que sufrían los viajeros del XIX y principios del XX. Los cruceros permiten visitar lugares desconocidos, paraísos cercanos, aún alejados de las grandes rutas trilladas. Estos últimos son cruceros en pequeñas embarcaciones, que muchas veces no pasan de la decena de pasajeros. Evidentemente se trata de cruceros particulares para viajeros particulares, con visitas de los pequeños puertos locales, alojamientos rústicos pero auténticos, un contacto mayor con la naturaleza y la fauna de estas islas del otro lado del mundo.
Rutas, puertos, escalas y circuitos.
Progresivamente analizaremos más detalladamente cada destino, por lo que sólo esbozaremos las maravillas que se pueden conocer y visitar con los cruceros por el Pacífico.
Desde Sidney salen muchos cruceros. Algunos llegan a Dunedin en la isla sur de Nueva Zelanda tras visitar Auckland, Napier y Wellington, para volver a la urbe australiana unas dos semanas después.
También zarpando de Sidney pero dirigiéndose al norte, otras rutas recorren toda la costa de Australia y la Gran Barrera hasta Noumea en Nueva Caledonia para volver a Sidney tras 15 días de navegación.
De Noumea en Nueva Caledonia hay rutas de 15 días hasta Darwin en el norte de Australia, pasando por Townsville y Cairns. La visita de la Gran Barrera y del archipiélago francés está incluida, tras lo que llegaremos a las tierras del cocodrilo en el Territorio del Norte.
También desde Sidney, cruceros de 20 días recalan en Honolulu, atravesando todo el Pacífico oceánico. No pueden faltar escalas en Polinesia (Papeete, Moorea, Bora Bora, Raiatea).
Finalmente Perth y Melbourne también ofrecen recorridos por el sur y oeste de Australia.
Todos estos cruceros se pueden realizar en sentido contrario, es decir, zarpando de Hawai o Nueva Zelanda.
Nueva Zelanda.
Además de los cruceros que unen Sidney o Melbourne con Nueva Zelanda, en la tierra de los Kiwis destacamos Auckland, el gran puerto crucerístico. De allí ciertos recorridos nos llevan a las islas Cook, Fidji y Polinesia. Otros se dirigen a Vanuatu, Nueva Caledonia y Papua.
Polinesia francesa.
Además de los barcos que llegan desde Australia, Estados Unidos o Nueva Zelanda, en la Polinesia francesa encontramos cruceros personales y con gran encanto. El exotismo de las Marquesas se saborea en recorridos de siete días que salen de Nuku Hiva.
Otros recorridos similares unen la capital Papeete, en Tahití, con las Marquesas, o recorren el archipiélago de las Sociedad en circuitos de 10 días.
Las antípodas encierran mucho encanto y esperan a los más valientes de nuestros lectores.
