Los cruceros fluviales son relativamente nuevos y han revolucionado el mundo del crucerismo. No obstante, haciendo un poco de memoria podemos darnos cuenta que los ríos, han sido para el ser humano uno de los primeros canales de comunicación. Ya sea el Nilo, el Rin, el Sena, el Danubio o el Yang-tse, la humanidad ha utilizado los ríos para comerciar, comunicarse, desplazarse y desgraciadamente hacerse la guerra.
El turismo fluvial comenzó probablemente con las barcazas faraónicas en el Nilo milenario, y más recientemente, todos recordamos los barcos a vapor que recorrían el Misisipi y el Ganges.
Así, tras el auge de los cruceros marítimos, las compañías navieras han desarrollado este otro tipo de cruceros. Es cierto que no se trata de a inmensidad de los océanos, ni de la grandiosidad del mar hasta el confín del horizonte, pero a cambio tenemos muchas ventajas.
Cruceros accesibles, más cortos y más cercanos.
Entre las ventajas señalaremos la cercanía a las grandes capitales. Así para recorrer Europa montados en cruceros fluviales por Alemania, Francia, Rusia o Austria, sólo tenemos que acercarnos a París, Viena, San Petersburgo, Moscu, Ámsterdam o Munich. Los norteamericanos poseen el Missisipi, y los brasileños el Amazonas. En China, el Yang-TSE o el Río Amarillo.
Además de la cercanía las grandes capitales, los cruceros fluviales son menos agitados, por lo que las personas que no se encuentran bien en el mar disfrutarán sin marearse.
Los barcos son más pequeños, más humanos, y además las escalas son más abundantes y largas con lo que se pueden realizar excursiones a lugares que nos interesen. El precio y la duración suelen ser menores. Hay cruceros de 3 días hasta 14 o más.
Destinos:
Cruceros Fluviales en Europa
En Francia se puede recorrer el Sena desde París, el Garona desde Burdeos y el Ródano desde Arlés o Lyon.
El Rin recorre Bélgica, Holanda, Francia y Alemania, con lo que podemos embarcarnos en Ámsterdam, Estrasburgo o Colonia.
El Danubio nos permite visitar Austria, Alemania, Serbia, Hungría, Rumania y Bulgaria, desde Viena, Budapest o incluso Basilea y Estrasburgo, combinando Rin y Danubio.
Desde San Petersburgo y Moscu gracias a los grandes canales, podemos realizar interesantes cruceros por Rusia.
Ucrania se visita desde Odessa hasta Kiev en preciosos cruceros fluviales por el Dnieper.
Cruceros Fluviales en Asía
China se está convirtiendo e un gran país turístico, el río Amarillo y el Yangtse Kiang son sus destinos principales.
El Mekong es el gran río de la península de Indochina. Sus cruceros recorren Camboya y Vietnam.
En Birmania también existen cruceros fluviales por su cauce principal el del Irawady.
Crucero Fluvial por las gargantas del Yantse-Kiang, en China. Foto de pacoruina.
Cruceros fluviales en África
Egipto, cuna de civilizaciones le debe mucho al gran río africano. Los cruceros en el Nilo son míticos, novelados por Agatha Christie y recordados en innumerables películas.
En Senegal, el río homónimo ofrece cruceros poco conocidos en España y America Latina, pero muy interesantes.
Exótico es el crucero que recorre el Zambeze, en barcos de lujo que atraviesan Mozambique y Zambia, internándose en el África profunda.
Cruceros fluviales en America
En América podremos recorrer el Misisipi-Missouri a bordo de un crucero casi similar a los del siglo XIX.
O si deseamos degustar la selva en estado puro, recorrer el Orinoco en Venezuela, partiendo de Guadalupe en las antillas francesas.
Y que decir de internarnos en el gran río de América, el Amazonas que tanto hay que proteger ya que es el pulmón del planeta. Brasil selvático y la grandiosidad de Manaos.
Pronto otros ríos y otras rutas se incluirán en nuestra Guía de Cruceros.
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Buen viaje.
